¿Una bolsa biodegradable hecha de almidón de papa que puedes echar en la olla y consumirla? Sí, es posible

Lo comenta Celfia Obregón, presidenta del CITE Papa

La preocupación por el ambiente puede agudizar el ingenio y la inventiva, sobre todo si hay de base conocimiento científico. Así, casi como correlato al anuncio del Ministerio del Ambiente de su intención de proponer una norma que prohíba gradualmente el uso de bolsas plásticas, ha surgido la información de que se está trabajando en la elaboración de bolsas biodegradables en base al almidón de papa.

La peculiaridad es que, además de representar un impacto mucho menor al ambiente, pueden usarse como insumo alimenticio.

Así lo dio a conocer Celfia Obregón, presidenta del Centro de Innovación Tecnológica (CITE) Papa y otros Cultivos Andinos. “Tenemos papas altas en contenidos de almidón y trabajamos con la Universidad de Wisconsin, Estados Unidos, para, aprovechando las papas nativas del sur en Puno, tener bolsas, envases y vasitos biodegradables hechos con almidón de papa”, explicó.

Agregó que, una vez usadas, las bolsas pueden dejarse de lado y se van a descomponer rápidamente, pero también “se pueden echar en la sopa y listo, te va a alimentar”.

En esa línea, destacó que las papas nativas destacan especialmente por su alto valor nutritivo. De hecho, constan de macronutrientes como fósforo y potasio; así como micronutrientes benéficos para los menores como el hierro y el zinc, además de componentes del tipo de calcio y magnesio.

En otro momento, Obregón recordó que gracias al trabajo constante en mejoramiento genético del tubérculo, está próxima a lanzarse la papa de variedad Kawsay, palabra quechua que significa “Un buen vivir”.

Este nuevo alimento, que resalta por sus altos contenidos de hierro y zinc, podrá encontrarse en diversos supermercados. Será una opción competitiva frente a las conocidas yungay y canchán, esta última, muy versátil para la gastronomía y que representa el 70% del total que se produce en el país.

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